Desde que terminó la pandemia, con el boom del padel, en Urich se plantearon un objetivo: hacer la mejor paleta del mundo. Desde entonces, en la empresa fundada en 1989, mejoraron los procesos productivos de su fábrica en Argentina. Cambiaron la cabeza de todo el equipo de trabajo e invirtieron en tecnología.

«Adquirimos lo mejor que podíamos en cada aspecto. Cuando logramos lo mejor que podíamos hacer acá, que se vio en paletas con buena terminación, estructura y muy poca rotura, ahí se planteó la posibilidad de ver qué paleta se podía hacer sin las limitaciones que teníamos acá. Comenzamos a tener demanda en España e Italia y concluimos que era el momento. Lo analizamos y nos fuimos a armar una fábrica afuera», comenta Diego Ricci, director general y responsable de desarrollo de Urich.

Ya en Europa, se consiguieron muy buenos proveedores tanto de matrices, computarizadas hechas en España, materiales de gomas nuevas en Alemania, resinas muy nuevas, etc. «La paleta que hoy fabricamos en Argentina está muy poquito por debajo de las grandes paletas de España y no tiene que ver con los procesos productivos sino con los materiales», afirma Ricci.

«Desde hace unos años en Urich tenemos la intención de abrir una nueva fábrica para acercarnos al circuito más competitivo de padel a nivel mundial, ofrecer los productos que sabemos son de primer nivel, y posibilitar también entonces la utilización de materias primas que no siempre llegan con fluidez al país. En ese camino, elegimos instalarnos en Málaga, España. Lo que nos permitió obtener nuevas densidades de gomas y tecnologías de accesorios con impresión 3D.  Trabajamos todos los modelos con carbonos de la mejor calidad y las mejores resinas, ademas de ganar en cercanía con el circuito europeo y sus formas de juego», especificó el Director General de Urich.

En la parte comercial, Urich tiene varios focos de demanda en Italia, España y México, además de ser una marca líder en 30 años del mercado argentino. El mercado Europeo y el emergente son los nuevos objetivos. «Montamos la fábrica mejorando aún más la tecnología que teníamos acá, a nivel infraestructura de fábrica y materiales. Ahora estamos capacitando al equipo con la idea de fabricar la mejor paleta del mundo. Y sabemos que lo vamos a lograr» confiesa Ricci. La fábrica incorporó la tecnología de impresión 3D en España para accesorios antivibradores en los huecos y en el corazón. A partir de Abril se aplicará también esta tecnología en Argentina en la gama de carbono.

«Estamos produciendo, pero preparando al equipo. El producto este comenzó hace dos años. Llevamos gente de Argentina para capacitarla en España. Estamos haciendo stock pero pocas paletas, para capacitar al equipo tanto en la forma de producción, en la regularidad como en los valores de excelencia de la marca», confiesa Ricci.

El Padel va cambiando. La mejor paleta del mundo en la década del noventa no se parece en nada a la mejor paleta del mundo del 2000, y tampoco a la de hoy. Urich tiene la meta de producir en 5 años la mejor paleta del mundo, y poder replicar su proceso productivo tanto en la fábrica de Europa como en Argentina.